Sobre las pasiones ardientes

 

Buenas tardes y Bienvenidos:

He de reconocer que este tema me lo ha sugerido el último episodio de "El último Peldaño" de Joaquín Abenza (mi admirado Joaquín Abenza), que hablaba de un fenómeno curioso ocurrido en la localidad italiana de Canneto de Caronia. Si bien habla de una clase combustión espontánea diferente, centrada en los electrodomésticos y enseres de las casas, siempre es un tema que me ha llamado la atención. Para los interesados en la historia de Canneto de Caronia, os dejo un enlace sobre el tema:

https://www.elheraldo.co/cultura/el-miedo-vuelve-canneto-de-caronia-168855

Pero yo prefiero centrarme en el tema principal del misterio que es la combustión espontánea humana. A modo de breve resumen diremos que la combustión espontánea humana es un supuesto fenómeno donde el cuerpo de una persona arde por completo sin exposición a causas externas. El hecho es que algunas veces lo encontrado por los investigadores ha sugerido esta posibilidad, con los restos de la persona convertidos en cenizas, pero sin haber afectado al resto del mobiliario. Todos conocemos por ser bastante reciente el caso del bebé indio que se "autoquemaba" de hace apenas unos años: os dejo el enlace al caso curioso:

https://www.elcomercio.es/20130814/mas-actualidad/sociedad/bebe-ingresa-hospital-combustion-201308140751.html

Así que estamos ante un fenómeno que no es hasta que hace un tiempo que los experimentos de J.D. De Haan ha dado un poco de luz al asunto, experimentos datados en 1998. Así que es un fenómeno estudiado recientemente...seguro, ¿Verdad?...

Minerva, o el Revisor General:

Pues va a ser que no: ante vosotros tenéis la portada del Minerva,  una obra periódica que está fechada en 1807. Es una obra de carácter científico, y nos tenemos que ir a sus páginas 225 a 231 donde hace una descripción profunda de este fenómeno, e incluso se aventura a darnos una serie de características sobre el mismo. Recordemos que estamos hablando de 1807. Incluso habla de una casuística donde resaltan los siguientes hechos:

1º) Que estos fenómenos acontecen generalmente a personas de edad avanzada

2º) Que estas personas tienen formas de vida poco activas

3º) Que es más frecuente en las mujeres, por sufrir más de astenia y usar licores fuertes.

4º) Que los que fallecen son personas o muy obesas o muy flacas

5º) Que siempre hay algún tipo de material inflamable cerca de donde se produce

6º) Suele ser un fenómeno rápido

7º) Que el fuego no se apaga con agua y que sólo quema los cuerpos cercanos

8º) Un olor característico a brasa caliente bajo la ceniza (empireumático)

9º) El tronco se consume casi completamente, respetando cabeza y extremidades.

10ª) Suele suceder en países del norte y en época de primavera e invierno.

Es curioso que muchas de estas características se han mantenido a lo largo del tiempo, y en cualquier estudio sobre el tema, estas características se mantienen. Os pongo el enlace para vuestro disfrute:

http://hemerotecadigital.bne.es/issue.vm?id=0003730142&page=227&search=%22combusti%C3%B3n+espont%C3%A1nea%22&lang=es Páginas 225 a 231.

Este estudio fue luego pasando de un lugar a otro, por lo que creo que he encontrado una de las primeras fuentes donde se trata el tema de la combustión espontánea desde un punto de vista científico, y he de decir, de nuevo, que fue en nuestro país.

De nuevo, al Congreso:

Permitidme ahora que en un giro maestro de la historia os presente a uno de nuestros insignes diputados del año 1838, el señor Lorenzo Arrazola:

D. Lorenzo Arrazola García, nacido en 1795 y fallecido en 1873 fue un político, abogado y catedrático de universidad español. Fue ministro de Estado y después Presidente del Consejo de Ministros de España. Fue en seis ocasiones Ministro de Gracia y Justicia, y nos interesa sobre todo la primera de estas veces, que abarcó desde 1838 a 1840.

Y diréis, ¿qué tiene que ver este señor con la combustión espontánea?, pues ahora viene la sorpresa: resulta que en las actas de la discusión de una propuesta de ley sobre la continuación de la contribución decimal, dentro de la crónica que hace el periodista en el medio Eco del Comercio del 27 de abril de 1838, se recoge la intervención de nuestro hombre, y prefiero ponerla tal como está redactada. Juzgad vosotros mismos:

Atención sobre todo a la última frase: un fenómeno paranormal, puesto en duda (muchas dudas) fue capaz en 1838 de colarse en el debate del Congreso. Desde luego, cada día que pasa no paro de sorprenderme.

Os paso en enlace del intercambio, para que gocéis del momento:

http://hemerotecadigital.bne.es/issue.vm?id=0003091628&page=1&search=%22combusti%C3%B3n+espont%C3%A1nea%22&lang=es Primera Página.

Así que, amigos míos, cuando alguien os diga que en el Congreso se tratan cosas muy serias, recordad que ya van tres que sepamos: los ovnis, el Espiritismo y ahora, la combustión humana espontánea.

Deseo que os haya gustado y me despido hasta mañana, que espero que sea más y mejor.