"Posesión Infernal" rural version

 

Buenos días a todos:

Creo que uno de los aspectos que más estupor y curiosidad causan a los amantes del misterio son aquéllos relacionados con la relación entre los que denominamos "espíritus" y los seres vivos. La teoría dice que cada uno de nosotros tiene su propio espíritu que "anima" su cuerpo. Pero ¿qué ocurre cuando ese espíritu que habita en un cuerpo no es el que debería de ser?. En ese caso estamos ante una "posesión".


Al fin y al cabo, el medium en el espiritismo no es más que una persona que ofrece su cuerpo físico para que otro "espíritu" tome posesión del mismo, y a través de él, pueda expresarse. Pero en este caso estamos hablando de una "relación consentida" e incluso buscada. Otros tipos de posesión por espíritus que quizás no sean tan "deseadas" son las que pueden ser más perniciosas para el "huésped" espiritual. Y dentro de ese grupo de posesiones, hoy voy a comentaros una que seguro que muchos conocéis, pero que me ha llamado la atención, sobre todo por cómo se ha analizado.

Moeche:

 Moeche es un municipio de la provincia de La Coruña, perteneciente a la comarca de Ferrol.
Su nombre proviene del latín, y signfica "modesto". Y en este pueblo pequeño y modesto ocurrió un suceso que fue noticia y portada de varios periódicos durante 1925. Así que como siempre, vamos a meternos en faena.

28 de enero de 1925:

El día 28 de enero de 1925, el periódico coruñés El Orzán: diario independiente se hacía eco de un caso que tenía conmovida a toda la comarca de Moeche. Conozcamos a Manuela Rodríguez: una mujer joven de 22 años, labriega  que desde hacía 4 años estaba enferma de tuberculosis (la llamada "peste blanca") y que le había provocado un extremo agotamiento, que a estas alturas de la enfermedad era de mal pronóstico.

Vivía en la parroquia de San Jorge de Moeche (en la foto), en una casa humilde junto a sus padres, que trabajaban en las tierras del Marqués de Cavalcanti. Como hecho curioso, su padre también era "santero", es decir, se dedicaba a pedir limosna en nombre de un santo.

Sin embargo, el 12  de enero de 1925 Manuela sufrió un cambio repentino en su manera de actuar: comenzó a hablar en tercera persona, llamándose a sí misma como "la niña", comentando que quien hablaba por su boca era un clérigo de Ortigueira muerto en La Habana. A partir de ese momento comienza a hablar con acento cubano y voz ronca, dando consejos y opiniones sobre moral cristiana, además de conocer la liturgia de la misa. Muestra conocimientos de dogmática y filosofía que no parecían muy propios de una labriega de 22 años de la zona de Galicia.

El cura de la zona no sólo no lo ve mal, sino que deja que Manuela llegue a dar misa y que desde el balcón de su casa promulgue el sermón dominical. El periódico El Orzán organiza un viaje para entrevistar a la poseída.

En dicho artículo el periodista informa que la enferma aunque frágil, tenía aspecto elegante y que se mostraba locuaz. Durante la entrevista la afectada comentó que el espíritu del clérigo entró mientras bebía agua en un arroyo, y que este espíritu estaba purgando algunas faltas cometidas por el clérigo en vida. Incluso se llega a afirmar que Manuela daba misas en latín y casteillano.

En el mismo periódico, el insigne catedrático de patología mental y por aquel entonces director de la revista "Anales Españoles de la Beneficencia Municipal" opina que el caso es un fraude:

"Ni Richet ni nadie puede sustraerse al fraude, frecuentísimo en estos habilidosos sujetos, y el fraude se encuentra en la mayor parte de las experiencias si se busca con cuidado, Le recordaré por la semejanza con el caso Moeche los mediums Margarita y Catalina Fox, quienes, como Manuela, consiguieron con sus experiencias fanatizar a las gentes..."
"...En resumen, es mucho asunto para que sean suficientes las palabras para hacernos creer, Yo, mientras no vea el primer caso, seguiré teniendo en cuenta a estos sujetos por vividores o por enfermos..."



En el otro lado, tenemos a D. Mariano Roso de Luna, seguidor de la doctrina teosófica y del que me gustaría indagar un poco más porque me parece una figura de una gran talla injustamente olvidada en nuestro país. Para D. Mariano:
"...El caso que usted me consulta no es nuevo: en Orirente se llama a`vesha y en Occidente "de doble personalidad" como el de Félida del prof. Hazán; el de Miss Florencia Cook  del prof. W. Crookes, etcétera..."

Como todos estos casos fueron objeto de gran polémica, y esta polémica sobre este caso llega hasta nuestros días.

La Iluminada de Moeche, cuadernos de Atención Primaria:

He de reconocer que siempre que aparece alguna derivación médica sobre un asunto me llama sobremanera, ya que como sabéis es mi profesión.

Y más como en este caso, se trata de una discusión de un caso que estuvo y está envuelto en el misterio. De todo el artículo, voy transcribir la conclusión que me parece muy interesante:

"Aplicar diagnósticos de hoy en día a pacientes de hace un siglo puede adolecer de ser una falacia categorial...Sin embargo, los datos del caso de "la espiritada de Moeche" asi como lo que podemos inferir de los informes de la prensa y de los médicos que la examinan cuanta la información obtenida sobre el caso, podríamos pensar que estamos ante un caso de la esfera de la Histeria (disociativo, personalidad múltiple, psicosis histérica....). Lo cierto es que la histeria es una de esas entidades que se reinventa a lo largo de los tiempo y tiene una enorme maleabilidad cultural."

Corolario:

Como bien dice el artículo, es complicado no caer en el "presentismo" actual, es decir, interpretar con los criterios de hoy los sucesos del pasado, y como en todo caso de este tipo.

Si bien la explicación que se aduce para este fenómeno es la presencia de una "personalidad múltiple" en Manuela, ¿no es aún más misteriosa la explicación "científica" que la de la posesión espiritual?. 

No se sabe mucho del destino de Manuela: su patología de base (la tuberculosis) y su delicado estado de salud nos da seguridad de que tuvo que fallecer relativamente joven.
No quedan parientes vivos de Manuela, sólo queda la casa donde vivió Manuela: un misterio para que siga siéndolo tiene que tener esos finales "inacabados", así que sólo me queda plantearos una pregunta, vosotros ¿con qué explicación os quedáis del hecho?, ¿la vía espiritual o la vía psicológica?.

Saludos y hasta mañana que seguro que será más y espero que mejor. Os dejo las fuentes del artículo:

El Adelanto : Diario político de Salamanca: Año XLI Número 12490 - 1925 Febrero 07
El Cantábrico : diario de la mañana: Año XXX Número 11158 - 1925 febrero 1
El Orzán : diario independiente: Año VIII Número 2103 - 1925 febrero 6



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