Un problema de tensión

 Un problema de tensión...



Puede que uno de los problemas más desafiantes a los que se enfrentan todas las hipótesis de la conciencia que actualmente se postulan como la verdadera explicación del origen de la misma sea el denominado problema duro o difícil de la conciencia. Pero, ¿en qué consiste este problema?. Para decirlo brevemente, una hipótesis de la conciencia que intente ser la clave del origen de la conciencia debería poder explicar la subjetividad ante los mismos estímulos. Es el gran problema al que la mayoría de las hipótesis de tipo materialista o funcionalistas se enfrentan. 


Para poder ilustrar con un ejemplo claro lo que significa este “Santo Grial” de la conciencia me gustaría hacer un pequeño experimento. Creo que en nuestro país (España) si hay un deporte que despierta pasiones es el fútbol: guste o no guste, todos tenemos nuestro equipo favorito y que despierta pasiones. Pero el deporte del fútbol se basa (entre otras muchas cosas, y perdonen pero no soy muy experto: entre usted y yo, el experto es mi hijo), en el enfrentamiento normalmente incruento (esto con reservas) entre dos equipos con intereses opuestos e irreconciliables: ambos quieren meter al menos un gol más que el contrario. Así que siempre en todo encuentro se enfrentarán dos equipos, y vamos a ponernos en situación: queda 1 minuto para que acabe el partido, y los equipos van empatados a 0 goles; en ese momento se pita un penalti a favor de uno de los dos equipos. ¿Cómo verán la situación los aficionados de ambos equipos?



Pues en estos casos estoy seguro que el mismo hecho (el penalti) será visto como “clarísimo y totalmente justo” para los aficionados que apoyaban al equipo que se ve favorecido por el mismo y “totalmente injusto e inventado” para los aficionados del equipo que sufre el penalti. Como vemos, estamos ante un mismo hecho, pero da una interpretación totalmente diferente; desde un punto de vista biológico, en ambos tipos de aficionados se estimulan y se usan las mismas estructuras cerebrales y los mismos circuitos neuronales, y sin embargo, cada uno vive el mismo hecho de una manera totalmente diferente. Es este hecho el que trae como locos a los investigadores de la neurociencia y que a día de hoy sigue siendo un problema por resolver.


Lo que tenemos realmente es un problema de perspectiva, de marco de referencia. Cada uno de nosotros observa el mismo fenómeno desde su propio sistema de referencia, su sistema de valores con los que mide el suceso, y eso da lugar a la diferente interpretación de los sucesos que carecen de esa subjetividad. Este problema es nuevo…un momento…¿este problema es nuevo?. Pues me parece que acabo de caer que no es nuevo, y ya tuvo un antecedente que creo que les va a sorprender. Y es el problema de la invarianza de las leyes de la física independientemente del observador. Pero como siempre, antes de empezar, es importante que recuerde dos cosas. En primer lugar no soy un experto en el tema (como habrá comprobado, no soy un experto en nada), y en segundo lugar a partir de este punto recuerde que…



Bueno, tal como les indicaba, con las leyes de la física teníamos un problema parecido: éstas no podían depender del sistema de referencia que se tomara, es decir, deberían ser constantes, así que ¿qué hicieron los físicos (y matemáticos) para resolver ese problema?. Pues crearon el concepto de lo que es un tensor. Me van a disculpar los grandes expertos en el tema, pero para poder decirlo de manera muy sencilla, un tensor es la forma en la que se puede poner de acuerdo a varios observadores sobre una determinada magnitud, independientemente del sistema de referencia en la que se haga esa medición, es decir, independientemente del sistema de referencia (¿les empieza a sonar?).

Ahora, volvamos a nuestro problema duro de la conciencia, a nuestro partido de fútbol, a nuestro último minuto: el hecho de que el penalti sea justo o no depende del sistema de referencia que lo valora, ¿y si el penalti fuera justo e injusto a la vez?. Tal vez una de las claves sobre el problema duro de la conciencia podría ser el diseño de un “Tensor de la conciencia” que permitiera unificar todas las visiones subjetivas sin tener que renunciar a ninguna. Así que desde mi punto de vista, creo que sería interesante que las hipótesis que intentaran explicar el origen y funcionamiento de la conciencia deberían incluir además un diseño de un “Tensor de la conciencia” para poder empezar a atacar el famoso problema difícil de la conciencia. Sé que ha sido algo complicado, así que por ahora hasta aquí llegamos y les espero en la próxima entrada...si han sobrevivido a esta subida de "tensión".






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